Esos son los días que faltan para que un nuevo TT empiece… el de 2013, por mucho que me/nos pese, ya se ha acabado.
En primer lugar, lo siento por el retraso… han sido 24 horas… y ahora mismo, estoy escribiendo estas líneas desde un hotel de mala muerte a las afueras de Heysham, donde hemos desembarcado a medianoche, procedentes de Douglas.
Vanessa duerme en el tercer piso, y yo estoy en la recepción, si se le puede llamar así, porque es como un recibidor de una casa, todo emmoquetado encima de un suelo de madera que cruje cundo andas. Estoy al lado del router, mendigando wifi como siempre, para ver si puedo subir los dos videos y quitarme este peso de encima!
Ayer Vanessa me obligó a salir. El día había sido muy intenso con la participación de Tim en la categoría de Lightweight, y después de tanto curro y tantas emociones, fuimos a un pequeño restaurante francés, situado al final de la bahía de Douglas, y allí nos juntamos Tim, su novia Blandine, su padre Silvestre, un marshall francés que hace 15 años que viene al TT, Vanessa, mi suegro y un servidor.
La cena estuvo bien, aunque entre que nos bebimos dos botellas de vino, que la noche anterior solo había dormido 4 horas, y que tenía remordimientos por haber dejado la faena de los videos por hacer… al final de la cena, me empecé a marear (sí, vamos, que estaba borracho como una cuba), y no estuve demasiado participativo.
De vuelta a casa, fue Vanessa la que pilló la furgo y la responsabilidad, porque Jean Noël estaba en un estado similar al mío. Vaya tela con la niña, no le da miedo nada… la miraba y parecía que fuera camionera de toda la vida! Qué suerte tengo! Jejeje!
Como decía, la jornada fue muy intensa.
Empezamos con la carrera que yo esperaba desde hacía 15 días, desde que empezó el TT, la de la categoría de lightweight, con la moto de martimotos.com. Bueno, después de una conversación muy interesante el día anterior con Billy Mckinstry, ya no era solamente una moto de martimotos.com, sino que eran dos. Billy se enrolló mucho, y me puso más de 10 pegatinas de martimotos.com en el carenado de la moto de Ivan Lintin, la estrella del team Mckinstry.
Como Tim no había rodado demasiado con la Kawa (perdimos mucho tiempo poniendo a punto la MV Agusta), no teníamos demasiadas imágenes con esa moto, y queríamos grabar la salida, y después alguna curva que molara. Así que trazamos un plan ambicioso, para poder grabar la salida, la llegada y la curva de Creg Ny Baa (que está a 15 kilómetros del paddock por carreteras alternativas, ya que la carretera principal es el propio circuito y, obviamente estaba cerrada). Teniendo en cuenta que la carrera de lightweight es a solo 3 vueltas, y las vueltas se hacen por debajo de los 20 minutos… nosotros íbamos a hacer nuestro TT particular con la furgo de martimotos, yeaaaahhh!
Y no nos salió tan mal! Pudimos grabar la salida desde un sitio privilegiado, tanto con la cámara reflex, como con la cámara con la que grabo en slowmotion. De allí nos fuimos pitando a Creg Ny Baa, jugándonos la vida y con Jean Noël flipando, pero creo que también le va la marcha. Cogimos la segunda vuelta de Tim en esa zona, y otra vez rally TT por carreteras de mala muerte, hasta llegar por los pelos a grabar la llegada de Tim a boxes, depués de hacer un carrerón. Lo veréis en el vídeo, creo que ha quedado bastante apañado.
La Mckinstry se portó de lujo, y Tim consiguió entrar en la posición 27. Si, ya sé que muchos diréis… uffffff, el 27… pero os aseguro que en un segundo año, llegar en esa posición, es toda una gesta. Para que os hagáis una idea, el año pasado, con Antonio Maeso en nuestro equipo, y en su quinto TT, consiguió hacer como mejor posición la 23ª, así que creo que el resultado de Tim es buenísimo.
Si, solo faltó la guinda. No os negaré que cuando Tim llegó a meta, yo estaba convencido de que la réplica de bronce estaba en el saco, y creo que él, también. Todo había ido de lujo, la moto había acabado, y a él no le había adelantado nadie. El problema fue el carrerón de James Hillier, el ganador, que marcó un tiempazo que dejó muy caras las réplicas, tanto las de bronce como las de plata. En el vídeo os explico un poco mejor como va esto de las réplicas.
A la una del mediodía, el plato fuerte de la quincena, el Senior TT.
Tim me había comentado que, por la mañana, había ido al fisio (la organización paga a todos los pilotos unas cuantas sesiones), y había coincidido con Michael Dunlop, que estaba bastante jodido de la espalda. No me extrañó que decidiera no participar en la categoría de lightweight, reservándose así para el Senior TT.
Pensad que el senior TT son seis vueltas (360 km) y la lightweight son tres más (180 km), y todo esto a más de 210 km/h DE MEDIA… así que después de dos semanas haciendo quilómetros por un tubo, solo un extraterrestre puede resistir a tanto esfuerzo. Michael Dunlop está cerca de ser un extraterrestre, pero aún no lo es del todo.
La salida de las 13h00 fue puntual, pero cuando los de delante habían salido, un piloto de clase media, perdió el control de su moto en la bajada de Bray Hill, y ésta impactó contra un andamio lleno de espectadores. El piloto no se hizo nada, pero varios espectadores fueron trasladados al hospital, aunque no se temió por sus vidas. El TT tiene estas cosas.
La carrera se aplazó hasta las 16h30.
La carrera definitiva empezó con Bruce Anstey de líder, segundo Michael, y quinto, John McGuiness. Cuando todo el mundo pensaba que al viejo John se le estaba pasando el arroz, empezó a marcar parciales increíbles en Cronk ny Mona y en Creg ny Baa (todo en la zona de la montaña), y al pasar por Grandstand, ya se había puesto líder.
El público quiere mucho a McGuiness, y aunque muchos son conscientes de que los jóvenes como Michael Dunlop o James Hillier van a dominar el TT en los próximos años, el apoyo que recibió ayer John «McPint» cuando empezó a liderar la carrera, le llevó en volandas hasta la línea de meta.
Detrás, un cansado Dunlop, que alcanzó a Anstey en la segunda vuelta, e intentó escaparse de él. Aún así, pasadas unas vueltas, decidió conformarse con la segunda posición, dejando que Anstey le volviera a pasar, para poder seguir su rueda hasta el final, sabiendo que si llegaban juntos, él quedaría 10 segundos por delante, porqué había salido 10 segundos después.
El viejo rockero Anstey, estuvo muy contento con su podium, teniendo en cuenta que en la carrera de Superbike no lo hizo como se esperaba. El resto de pilotos llegaron a meta, y no tuvimos que lamentar ningún otro accidente ni nada que se saliera de lo estrictamente deportivo.
Ahí, en ese justo momento… se acabó el TT.
No os puedo negar que una parte de mi estaba deseando que ese momento llegara. Son 15 días en los que no pienso en otra cosa que en grabar, editar y colgar… y al final se hace pesado, se pasan muchos nervios y se discute con las personas a las que más quieres.
No obstante, otra parte de mi, se quedó triste. Todo el año he estado pensando en este TT: Buscando un piloto a la desesperada después del silencio de Antonio. Preparando el viaje y el equipo de grabación. Leyendo mucho y mirando muchos DVD’s para no hacer el ridículo delante de la cámara … enfin!
Ahora me queda esperar al del año que viene, no sin antes agradeceros a todos el seguimiento que habéis hecho del blog y de nuestros videos. Gracias también por haber soportado mis berrinches de niño pequeño cuando veía que las visitas de los vídeos no arrancaban. Ahora, 15 días después, sumando las visitas en castellano y en francés… estamos por encima de las 40.000, y eso no estaba previsto ni en mis mejores sueños.
Prometo aprender para el año que viene, y no lanzar las alarmas tan pronto, aunque estoy seguro de que el trabajo que habéis hecho muchos de vosotros compartiendo y difundiendo los vídeos por la red, ha ayudado en gran medida a que éstos acaben de despegar, y me hagan ver que el año que viene tengo que volver a las isla.
Quedan 350 días… bueno, a estas horas… 349!!!
MUCHO GAAAAAAASSSSS, MOTEROSSSSSSSS!!!!!